Comprar una tarjeta gráfica de Nvidia seguirá siendo difícil en 2022: se mantendrán los problemas con los suministros

Comprar una tarjeta gráfica de Nvidia seguirá siendo difícil en 2022: se mantendrán los problemas con los suministros

1 comentario Facebook Twitter Flipboard E-mail
Nvidia RTX 3080 Ti

El mundo de los videojuegos y de la tecnología en general está atravesando un momento algo complicado, en gran parte por culpa de la pandemia provocada por el coronavirus. La escasez de semiconductores y los problemas en las cadenas de distribución a nivel global están ralentizado la producción de productos y Nvidia ha confirmado que va para largo.

En una nueva reunión con los inversores, Jensen Huang, CEO de Nvidia, ha explicado que la demanda del sector de los videojuegos sigue siendo más alta que la oferta y que este desajuste del mercado se alargará aún durante varios meses. Nvidia creía hace tiempo que esto solo duraría hasta finales de 2021, pero ahora cree que será una constante durante 2022.

"La demanda 'gaming' continua superando la oferta mientras esperamos que los inventarios se mantengan por debajo de los niveles objetivo al salir del tercer trimestre del año. [...] La demanda de RTX es bastante increíble [...] y Ampere es la arquitectura de GPU más vendida en la historia de nuestra empresa. Y, sin embargo, solo hemos actualizado menos del 20% de nuestra base instalada", ha indicado el CEO de Nvidia.

Huang se ha referido con esta declaración a que, por ejemplo, los usuarios de GPU de la serie GTX no han podido dar el salto a las nuevas RTX de la Serie 30 por la escasez que hay y solo se ha reemplazado cerca del 20% de las GPU antiguas en los equipos de los clientes. Sin duda, es un dato que da a entender la dificultad de adquirir una gráfica actualmente.

Huang también ha asegurado que, aunque Nvidia ha conseguido suministros para poder desarrollar sus productos, seguiremos viendo un entorno en el que los recursos se obtendrán de forma muy "contenida", lo que implica que tampoco podemos esperar una mejora importante en el stock. Todo esto viene a confirmar lo que piensa Intel, que no podrá satisfacer la demanda de chips hasta 2023.

Comentarios cerrados
Inicio