Está claro que la principal moda a la hora de montar un ordenador gaming son los LEDs y el RGB, pero quizás esta estética esté empezando a quedar anticuada en pos de una más compleja: las pantallas. No, no me refiero a monitores, sino añadir pequeñas pantallas para monitorizar aspectos de tu ordenador a cada uno de sus componentes, pero también como elemento estético que nos deja poner imágenes o vídeos. Ya las hemos visto en las refrigeraciones líquidas —e incluso en algunas de aire—, pero cada día más componentes empiezan a añadirlas.
Pantallas LCD en componentes, la nueva estética gamer
Y es que todos hemos visto montones de componentes con RGB. Memorias RAM, tarjetas gráficas, placas base, fuentes de alimentación… La estética gamer casi por defecto lleva años siendo las lucecitas y los arcoíris, pero las cosas parecen estar cambiando. En los últimos años, hemos la popularidad de las pantallas en nuestros componentes ha explotado. Si crees que estas solo están en lugares donde tiene lógica, como en la previamente mencionada bomba de la refrigeración líquida (como la Corsair iCUE H150i Elite) piensa dos veces.
Donde más sentido tiene ver este tipo de añadidos es, sin lugar a duda, en las propias torres. Al fin y al cabo, es lo primero que va a entrarnos por los ojos. La marca Hyte con su Y70 Touch entendió esto perfectamente, poniendo una pantalla táctil en el frontal de la caja. Aun así, es una de las torres más caras del mercado.
Las tarjetas gráficas también se han ido apuntando a esta moda, como prueba la RTX 3080 iGame de Colorful, que tiene una pantalla LCD que se levanta. De nuevo, este es otro de los componentes donde tiene sentido incluir estas estadísticas, pues suele ser una parte “central” de nuestro equipo. Al no estar tan arriba dentro de la caja, a algunos consideran esta estética excesiva, pero está a años luz de algunos de los ejemplos más absurdos de este tema.
Y es que si he empezado a escribir sobre esto, ha sido gracias a la marca Thermaltake. Nada en contra de sus productos, eso por descontado, pero su Pacific R2 Ultra Memory LCD Monitor Kit me parece un poco excesivo. Porque sí, estoy hablando de un añadido para RAM que cuenta con una pantalla para monitorizar su temperatura. Con un precio de casi 200 euros, comprenderás que haya arqueado la ceja al ver este accesorio.
ASUS también se ha apuntado a esta tendencia en muchos de los componentes que vende, pero el caso más curioso es el de su fuente de alimentación Aorus P1200W 80+ Platinum Modular. Esta tiene una pantalla LCD en uno de los lados donde te permite colocar el consumo de esta, texto personalizado, una imagen, un GIF e incluso un vídeo. De nuevo, aquí estamos hablando de pagar una cuota prémium por la fuente, pues cuesta 329,89 euros.
Por último, hasta hemos visto placas base con pantallas, algo que puede parecer relativamente normal hasta que te das cuenta de que MSI lo intentó con un panel táctil. La MSI Z690 Godlike cuesta unos aplastantes 1.500 euros. Es de suponer que su fabricante decidió que no merecía la pena este añadido, pues su sucesora, la Z790 Godlike no solo cuesta 500 euros menos, sino que no cuenta con este panel táctil LCD.
Valoraciones personales aparte, este tipo de estética, como puedes ver, cada vez está más generalizada. Sí que es verdad que es mucho más cara que el RGB, con lo que, al menos de momento, estará confinada a la gama alta, pero poco a poco podemos ver cómo las luces empiezan a dejar paso a otro tipo de decoraciones.
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